Coincidiendo con el centenario de su nacimiento, el Museo de Pollença y el Ayuntamiento organizan la exposición Poesía, del artista Gust Graas, que podrá verse en la Iglesia del Convento de San Domingo comisariada por Oliver
Spiecker y por Kit Graas, hija del artista.
A pesar de que nació en Luxemburgo, Graas tuvo una gran relación con Pollença. Participó en numerosas actividades del Museo de Pollença, como sus tertulias, y tenía (y sigue teniendo) un gran público.
La pintura de Gust Graas, a pesar de que puede tener pequeñas referencias figurativas, es un conjunto abstracto o con elementos vegetales o arquitectónicos que se manifiestan de manera críptica.
Dentro de Gust Graas vivían dos personas: uno era el abogado y alto ejecutivo de empresas aéreas y de mediados de comunicación televisivos; el otro era el artista. El primero, seguramente, era muy racional y movido por las certezas. El segundo, el artista, se movía por la intuición, la pasión, la sorpresa y la poesía. Porque como él mismo escribió (Notes d’atelier et peintures, abril 1991): “La abstracción de mi pintura conduce a un universo mágico lleno de poesía”.
