Nació en Estocolmo y creció en una familia de músicos. De niño, Jonathan Fritzén empezó a tocar la batería, más tarde vendrían el piano, el bajo, la guitarra, la flauta y el canto. A los 22 años ya había actuado varias veces en la televisión sueca y había recorrido algunos países con los músicos más respetados del jazz.
Con su primer álbum, Love Birds, Fritzén se convirtió en el primer pianista sueco en grabar un disco de smooth jazz. Le siguieron otros trabajos que conquistaron las listas de éxitos, lo que le valió ser considerado como gran maestro del jazz contemporáneo. Su nuevo disco es Fritzenized (2015), que ahora presenta en el Mallorca Smooth Jazz Festival.