Este espectáculo, ideado e interpretado por Marc Florencio, escenifica los sentimientos de un personaje un poco excéntrico. Su vida interior está representada por una antena, por la que transmite mensajes que harán reír pero también pensar en cómo vivimos y cómo buscar la autosuperación.
Dirigido a un público familiar, mezcla los malabares, la magia y el clown.