El núcleo de esta exposición está formado por una selección de obras (fotografía y video) que pertenecen a las series Twilight e Inercia, en las que Carlos Irijalba (Pamplona, 1979) trata los espacios destinados al espectáculo de masas frente al medio sublime de la naturaleza.
El lugar mítico deja de serlo para recibir una extrapolada luz artificial que todo lo impregna, en una imagen poderosa y renovada del territorio que tiene siempre como epicentro la escala humana.