Hasta hace poco respetables músicos, el cuarteto recupera su vertiente más teatral de la que surge la parte más desastrosa, gamberra y sinvergüenza largamente oculta de los miembros del grupo. Con motivo del Día de la Música presentan su trabajo Swindicat.
Combinan el virtuosismo con el humor desconcertante. Proponen un viaje por el jazz europeo, las melodías del mejor latin jazz, boleros e incluso bandas sonoras de películas antiguas.
Componen la banda Alfredo Ardanaz (violín y coros), Miguel Ángel Aguiló (violonchelo, percusión y coros), Toni Pastor (guitarra, triple, laúd, coros y técnico de sonido) y Xisco Aguiló (contrabajo y coros).