Desde 1984, Christian Boltanski lleva desarrollando su instalación Sombras en diversos monumentos de todo el mundo. Ahora lo adapta al espectacular edificio barroco de La Lonja de Palma convirtiendo este espacio en un fascinante teatro de marionetas a base de sombras y susurros.
Pequeñas figuras metálicas recortadas se amplían en las paredes de piedra adquiriendo una dimensión espectral, que aumenta con el movimiento coreográfico de las gigantescas formas y otorga al espacio un aire de ritual onírico.
De madre cristiana y padre judío, Christian Boltanski (París, 1944) es un artista audodidacta que a los catorce años dejó la escuela y comenzó a pintar. Más tarde trabajó con marionetas y en los inicios de la década de los años ochenta empezó a utilizar fotografías de personas anónimas. La muerte, la vida y la identidad son los temas recurrentes en su obra, en la que utiliza materiales frágiles como testimonio de lo breve de la vida.