Octubre y noviembre son los meses en que los micólogos salen a los bosques en busca de esclata-sangs (níscalos), un ingrediente imprescindible en la cocina de otoño de Mallorca. Esta feria está dedicada al preciado hongo con actividades diversas como exposiciones de micología, pintura y escultura. También se celebra una jornada gastronómica donde los restaurantes y bares ofrecen deliciosos platos elaborados con esclata-sangs.