Esta fiesta, creada en la década de 1980, se celebra el cuarto domingo de agosto en Lloret de Vistalegre para exaltar el consumo de higos. Después de una misa solemne, los habitantes del pueblo se reúnen en la plaza para torrar en los foguerons (hogueras) embutidos como botifarrons (morcilla) y llonganisses (sobrasada), que se acompañan de higos secos.