La artista Julia Galán (Castellón, 1963) presenta este proyecto en el que reflexiona sobre los diferentes roles que los hombres y las mujeres asumen impuestos por la cultura, la tradición, las normas o la religión.
Bacia es el nombre de una mujer africana que puede simbolizar a todos los seres humanos sometidos a la violencia y la dominación ejercida sobre el más fuerte sobre el más débil en un momento dado. En esta serie fotográfica se refleja de una manera poética el horror y la crueldad a la que están sometidas las mujeres, simbolizadas en las imágenes por las flores.
Una sucesión de atrocidades que hoy siguen produciéndose con total impunidad y que Julia Galán denuncia en este proyecto, como las mutilaciones genitales, las lapidaciones o el tráfico y la esclavitud sexual.