De factura barroca y planta cuadrada, está considerado el monumento civil más importante de Llucmajor. Fue recuperado por el ayuntamiento en 1842 tras la exclaustración de los franciscanos, destinándolo a cuartel de la Guardia Civil, juzgados y matadero municipal. Actualmente, después de un proyecto de rehabilitación, se utiliza como centro cívico y cultural.
A parte de las pinturas murales, descubiertas en 1999, tiene una curiosa exposición permanente formada por 134 tejas pintadas del siglo XVII con motivos alusivos al culto, encontradas en el convento de Sant Bonaventura. El espacio sirve también para albergar exposiciones temporales, conciertos y otras actividades culturales.
Zugang für Behinderte
Entrada gratuita