El último trabajo del artista mallorquín Felip Caldés (Sa Pobla, 1975), que ahora presenta en la galería Espai d'Art 32 de Pollença, supone el comienzo de una nueva etapa en su trayectoria artística iniciada en 2002.
Como una mirada telescópica a la naturaleza, el conjunto de obras de Agros dispersi son el yin y el yang, diálogos de meditación y contemplación y, al mismo tiempo, una interacción de la atracción del magnetismo de la madre tierra.