El escultor mallorquín Joan Oliver (Marratxí, 1978) presenta en esta exposición una veintena de piezas únicas realizadas en hierro y en formato real, de 125X40X40 cm y entorno a los 25 kilos de peso. Figuras orgánicas, antropomórficas, animalarias o simplemente volúmenes puros.
Las piezas han sido fundidas en una pequeña fundición cercana a Gerona, hasta donde se trasladó Joan Oliver para participar en todo el proceso de producción de las obras.